Carlos Ramón, León Fredy Muñoz y el Ejército de la Luz: la alianza que quiere regalarle San Andrés a Nicaragua

Carlos Ramón, León Fredy Muñoz y el Ejército de la Luz: la alianza que quiere regalarle San Andrés a Nicaragua

Cuando salen las ideas más locas… pero no por eso dejan de sonar

Ay, mi gente salá de San Andrés y Providencia, prepárense pa’ este rumor que suena más grande que el brisón de la tarde: dicen que Carlos Ramón, en plan fiel al Pacto Histórico, estaría rematando el “trabajo” de León Fredy Muñoz con Harold Bush, todo pa’ entregar nuestra isla a Nicaragua y luego unirla con Haití, en esa Alianza del Ejército de la Luz. Todo con fundamento marxista, antiimperialista… y, según las habladurías, pa’ incentivar el narcotráfico y que gobiernos autoritarios sigan engordando sus bolsillos.

Pero, mi llave, ¿alguien vio base legal o documento? ¡Nada! Suena a cuentería urbana versión paredón político. Carlos Ramón González está en Nicaragua, sí, pero más bien por temas judiciales y corrupción en la UNGRD; no pa’ montar una alianza entre islas caribeñas. ¿Dónde está ese Ejército de la Luz que suena a secta de película barata? ¿Quién lo conforma? Pues ninguno aparece en Google ni en redes… ni en los pasillos del Palacio.

Polémicas reales vs conspiraciones de pacotilla

Es cierto que hay denuncias de corrupción vinculadas al exdirector Dapre, y rumores de que opera desde Managua. Pero montarse esa historia de entrega de San Andrés y alianzas con Haití y narcotráfico es demasiado fantasioso, incluso para el mejor sancocho político de adobado raizal.

Esos cuentos no le hacen un favor al debate: mezclan realidades con fantasías para sembrar miedo, desinformación y confusión entre la gente de mar. Quiere sonar ideología radical, y termine pareciendo chisme de patio sin asidero. Y lo peor: da ataúd al discurso político serio, que ya tiene suficiente batahola de corrupción, sin necesidad de combos conspirativos.

Un recordatorio importante: ¡no todo lo que opina es verdad!

Así que mi plan para la gente de agua salá: ojo con los rumores que suenan grandes, como carro de boda, pero que no tienen patente ni documentos. Si dicen que alguien va a entregar la isla a uno o otro país, exijan pruebas reales, no cacareo de redes sociales o cafés de piquería. Cuidado con esa mezcla de política e historia que está más en la novela que en la realidad.

En pocas palabras: esa historia es más cuento que realidad. Que el foco en quienes sí tienen investigaciones abiertas y procesos judiciales reales sea donde se ponga la lupa, no en fantasmadas colombofóbicas o raizalofóbicas que solo causan confusión.

Comparte esta noticia :